Fin del verano: galette de melocotones

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El verano ya llega a su fin y con ello sus maravillosas y sabrosas frutas. Ya, ya sé que el otoño trae otras frutas ricas como son la granada, las chirimoyas o las uvas, pero qué queréis que os diga, para mí las mejores frutas son las del verano, tan jugosas y deliciosas.

La refrescante sandía, el dulce melón, los albaricoques, las paraguayas, las coloridas ciruelas, las mini peras de San Juan… Pero sobre todo melocotones, aterciopelados por fuera pero tersos por dentro y sobre todo dulces y gustosos, sí, creo que los melocotones son mis favoritos, mi fruta preferida del verano.

Tan entrados en septiembre estos empiezan a escasear y aunque su pinta en el mercado no son tan buena no puedo resistir a comprarlos. Puede que no sean los mejores para comerlos así sin más, pues su textura es más blandita y a mí me gustan menos maduros, pero aún se pueden aprovechar si cocinas con ellos, desde mermelada, a guarnición para un bizcocho o como relleno de un ‘pie’, tarta o una galette, como esta que os traemos hoy.

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Hace unos dos años que os horneamos por primera vez una galette, una dulce de ruibarbo y otra salada con calabacín y ricotta. La verdad que no sé por qué no abundan más por nuestro blog, pues son súper fáciles de hacer y están buenísimas.

No necesitaréis más que una base de masa quebrada dulce, una pizca de mantequilla, un poco de azúcar espolvoreada y deliciosos trozos de melocotones, todo horneado hasta que los bordes se empiecen a tostar y la fruta a caramelizar. Olvídate de moldes o instrucciones precisas, de hecho no necesitarás ni receta y ni si quiera una excusa para hacerla, a mí me bastó tener 3 melocotones merodeando por la nevera. ¿Cuál es la tuya? Ánimo, métete en la cocina y ¡sorpréndete!

GALETTE DE MELOCOTONES (6 pers)

Podéis comprar la masa quebrada que venden ya preparada en los supermercados o podéis hacerla. Yo esta vez he decidido variar un poco la receta de la clásica masa y he combinado harina de trigo con harina de centeno para darle un toque más chic.

Si optáis por la versión rápida y usáis la masa del supermercado, saltad directamente a la parte del montaje. Si queréis dedicarle un poco más de tiempo empieza las instrucciones por aquí.

Masa quebrada dulce

40 grs harina de centeno

80 grs harina de trigo

15 grs azúcar

1 pizca de sal

90 grs mantequilla, fría y cortada en cuadraditos

25-30 ml agua fría

En un bol combina las harinas, azúcar y sal. Añade la mantequilla y con ayuda de las yemas de los dedos deshaz la mantequilla restregándola contra la harina, hasta que obtengas una textura de miga de pan. Añade el agua fría y mezcla hasta obtener una masa homogénea no pegajosa, si ves que está muy seca y no consigues hacer la bola, añade un poco más de agua. Aplana la masa en forma de disco y envuelve en plástico transparente y deja reposar en la nevera unos 30 minutos.

Pasados el tiempo, enharina la superficie de una mesa y con ayuda de un rodillo estira la masa hasta obtener un círculo de unos 30 cm de diámetro y medio cm de grosor. Transfiere a una bandeja con papel de horno. (Para que te sea más fácil, puedes extender la masa directamente sobre el papel de horno y así no tendrás problemas de que se rompa al transpasarla).

Montaje de la galette

3 melocotones, cortados en octavos cada uno

50 grs, más 3 cdas de azúcar

1 trocito de mantequilla

Mermelada de melocotón (opcional)

Precalienta el horno a 190ºC.

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Sobre la masa estirada espolvorea 1 cda de azúcar y dispón los trozos de melocotones dejando un borde de unos 2-3 dedos y espolvorea con los 50 grs de azúcar. Dobla los bordes hacia arriba envolviendo parte de los melocotones, asegúrate de que no se rompe para evitar que al hornearla el jugo de estos se salga. Pinta los bordes con agua y espolvorea las 2 cdas de azúcar restante.

Hornea unos 40 minutos, hasta que la masa esté bien hecha y crujiente y los trozos de melocotones medio caramelizados. Tan pronto como la galette esté fuera del horno, con ayuda de una espátula, colócala en una bandeja de rejillas para evitar que se reblandezca la base y se enfríe antes.

Si quieres que quede más brillante y vistosa, puedes pintar ligeramente la fruta con un poco de mermelada de melocotón templada.

Para disfrutar aun más de esta galette, sirve con helado de vainilla o yogur natural.

¿A que era fácil?

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