Pues anoche se celebró en Cataluña la noche de San Juan, aunque en realidad hoy es el día de San Juan, así que la noche será hoy y ayer fue la madrugada… No sé, esto es un lío.

He intentado buscar datos acerca de esta festividad y la información es más contradictoria si cabe.

Se supone que es una celebración pagana, pero aquí es el día de un santo.

Es una fiesta para conmemorar el solsticio de verano pero éste tuvo lugar realmente el día 21.

Aquí no solo no se celebra el día que se debe, sino que tampoco se ponen de acuerdo en hacerlo el mismo día (o la misma noche): unos la noche del 23, otros la noche del 24, y los más rezagados no lo hacen hasta el 29 de junio (San Pedro), ¿o lo celebrarán del 28 al 29?

Y por último, por supuesto que hay un postre típico, pero dicho postre no deja de ser más que una réplica de la Mona de Pascua pero con otra decoración.

Así que, basándose en todas estas premisas me pregunto si esta festividad no es más que una farsa o una excusa para hacer una fiesta y tirar petardos, eso sí, todo muy arraigado.

Total, que sea como fuere, anoche hubo reunión y barbacoa con amigos en Sitges, y de postre, lo dicho, coca de San Juan, o Sant Joan: base de brioche con fruta escarchada, crema pastelera, piñones y azúcar por encima. Para los menos tradicionales hice otra con trocitos de chocolate por encima, pero he de decir que en este caso la tradicional estaba más rica, más jugosa, sería por el exceso de condimentos.

Dicen que la noche de San Juan es una noche mágica. Si ayer se os olvidó celebrarla veis que tenéis otras alternativas en cuanto a fecha, que no se os olviden.

COCA DE SANT JOAN

Para el brioche puedes usar la misma receta base que utilicé para la mona.

Para la crema pastelera
1 huevo
500 ml de leche (o 250 ml de leche y 240 ml de nata)
125 gr de azúcar
45 grs harina de maíz (la maicena de toda la vida)
Cáscara de limón y/o vainilla

Mezcla el huevo, el azúcar y un poco de leche y deshaz la harina de maíz.
Pon el resto de la leche a calentar con la cáscara de limón y la vainilla y añade la mezcla de la harina.
A fuego lento no dejes de remover hasta que rompa a hervir, entonces retírala del juego y estírala sobre un tupper o una bandeja para que se enfríe.

Para el resto de la decoración basta con un puñado de piñones, 2 o 3 cucharadas de azúcar y un huevo batido.

Una vez que haya fermentado la masa por primera vez (después de haberla hecho bola y que haya doblado su tamaño), divide la masa en dos y extiéndela con ayuda de un rodillo. Coloca encima la fruta y la crema y deja que vuelva a fermentar (crecer) durante unas 2 o 3 horas. Entonces píntala con el huevo batido, echa los piñones encima, espolvorea el azúcar y hornéala a 170ºC durante unos 15 minutos.

Y ya está, la clásica coca de San Juan. A ver qué decoración me encuentro en la próxima festividad.