Es sin duda mi mezcla favorita: plátano y chocolate. Os recuerdo cómo definí un pudin con estos dos elementos que escribí hace casi un año: ¡manjar de los dioses!
Esta vez los ingredientes los hemos reconvertido en bizcocho y el resultado, por supuesto, tampoco defrauda. Con apenas medio vaso de aceite de girasol y pensando que lleva poquito azúcar puesto que los plátanos ya le aportan el suficiente, se podría decir que este bizcocho, ¡incluso es de dieta! Así que nada de sentirse culpable si picas tanto por la mañana como por la tarde, ¡es bien sano!
Su sabor es intenso, eso sí, no lo podemos negar, y si lo comes al día siguiente verás que el sabor del plátano sobresale más que recién hecho. Otra de las cosas positivas que le aporta el plátano (aquí todo son ventajas) es que son el elemento clave para que al cabo de los días (si es que todavía queda) se mantenga jugoso.
¿Qué más se le puede pedir?
Bizcocho de chocolate y plátano (10-12 rebanadas)
3 plátanos muy maduros
125ml aceite de girasol
2 huevos
170g azúcar moreno
225g harina
45g cacao en polvo
1 cucharadita bicarbonato de soda
Precalienta el horno a 170ºC. Engrasa y forra con papel de horno un molde alargado de 18*10cm aprox.
Aplasta los plátanos con ayuda de un tenedor, unas varillas o una batidora. Añade el aceite de girasol seguido de los huevos y el azúcar.
En un bol, mezcla la harina, el cacao y el bicarbonato y añádeselo a la mezcla anterior, batiendo ligeramente.
Vierte sobre el molde preparado y hornea unos 40 minutos o hasta que al insertar en el bizcocho un cuchillo este salga limpio, el bizcocho adquirirá un color bastante oscuro.
Deja que se enfríe y ahora sí, ya podéis disfrutarlo con el café, un poco de nata o simplemente así.
Un comentario en “Simbiosis perfecta: bizcocho de chocolate y plátano”