Insisto en la bondad de los días festivos entre semana, hacen que llegues más descansado al sábado y el domingo, e incluso te den ganas de estar más activo (aunque esto siempre es optativo). En mi caso el sábado me dio por cocinar, lo que no solo es un buen ejercicio de creatividad sino también de abstracción mental durante unas cuantas horas.

Esta vez eché mano de uno de los libros de Julia Child, que en España se conoce gracias a la película Julie y Julia (2009). Una señora americana que viviendo en París por estar allí destinado su marido, estudió en la Escuela Le Cordon Bleu y a través de libros y programas de televisión introdujo la cocina francesa en Estados Unidos.

Hice a mi manera un par de recetas: una quiche de frutos de mar, que ya os escribiré otro día, y estas berenjenas rellenas de champiñones. La verdad es que no sé si es porque puse los cinco sentidos en hacerlas, pero hasta yo me sorprendí de lo ricas que estaban (a pesar del aspecto, sí la parte estética fue la que desarrollé menos).

BERENJENAS ASADAS RELLENAS DE CHAMPIÑONES (4 personas)

2 berenjenas
1 cebolla grande
300-350 grs champiñones
100 grs queso cremoso (tipo philadelphia)
Perejil picado
Queso rallado
Pan rallado
Sal
Pimienta

(Según la receta muchas cosas se cocinarían con mantequilla, y aunque mi plan inicial era hacerlo así, finalmente y casi sin querer, lo hice todo con aceite de oliva).

Corta las berenjenas a lo largo y hazles unos cortes casi hasta el fondo, haciendo como una cuadrícula. Échales sal y ponlas en un escurridor durante una media hora para que saquen la mayor cantidad de agua posible.

Transcurrido este tiempo colócalas boca arriba en una fuente para horno, poniendo en el fondo de la fuente un pelín de agua. Enciende el grill del horno y colócalas relativamente cerca de la resistencia, durante 15 minutos o hasta que la parte superior se tueste ligeramente. Sácalas del horno y deja que se enfríen. No apagues el horno, ponlo para que caliente por todo.

Intenta quitar la carne de las berenjenas sin cortar la piel, que será luego el «contenedor». Ayúdate de los cortes que habrás hecho antes.

Pica la carne de la berenjena y colócala en un bol.

Pica la cebolla y pon la mitad en una sartén con aceite a fuego medio, cocinándola despacio durante unos 10 minutos. Cuando empiece a estar transparente, blanda, sazónala, quítala del fuego y añádela al bol con la berenjena.

Trocea los champiñones (yo lo hice en rodajas finitas pero puedes ponerlos como quieras o incluso enteros si son pequeños). Vete cogiendo puñados en las manos y aprieta fuerte, para que escurran y saquen todo el agua posible. Ponlos en la sartén con el resto de la cebolla. Pocha también a fuego suave durante 5 minutos, sazona e incorpora esta mezcla a la del bol con la berenjena y el resto de cebolla.

Añade al bol el queso cremoso y mezcla bien con un tenedor junto con el perejil picado (también puedes añadir albahaca o tomillo).

Rellena la piel de las berenjenas con la mezcla del queso. Por encima espolvorea el queso y pan rallado y pon una pizca de mantequilla en cada una para que funda mejor. Y al horno durante unos 25 o 30 minutos.

Si os sobra mezcla del queso podéis usarla como aperitivo sobre tostadas.

Lo dicho, ricas, ricas.