El postre inventado: trifle trisabor (limón, frutos rojos y chocolate blanco)

la foto-2

Pues hoy es San Estaban, y en Cataluña y otros países europeos, es festivo.

Aquí es típico comer canelones con la carne que sobró ayer del pavo.

Del postre nunca nadie dice nada, así que tenemos vía libre para hacer lo que queramos. Hoy me ha tocado hacerlo a mí (en realidad me iba a haber encargado en Nochebuena, pero entre unas cosas y otras tuve que retrasar el acontecimiento).

El postre elegido: trifle con base de bizcocho de limón, mermelada de frutos rojos y trocitos de fresas, crema de chocolate blanco y para rematar una capa de nata (sin azúcar, eso sí).

¿Qué qué es un trifle? Aquí os podéis hacer una idea, pero en resumidas cuentas es una especie de copa grande y profunda, es decir que a falta de copa, bien podemos utilizar una ensaladera o una flanera.

BIZCOCHO DE LIMÓN

3 huevos
250 grs azúcar
1 yogur
1 limón entero
100 ml aceite suave
250 grs harina
1 sobre de levadura

Trituramos el limón entero (previamente lavado y quitándole los culos) con las cuchillas de la batidora. Reservamos.
Batimos bien los huevos con el azúcar, añadimos el yogur y el limón triturado. Incorporamos el aceite.
Mezclamos la harina y la levadura, y lo añadimos poco a poco a la crema.
Lo echamos en un molde previamente engrasado y lo horneamos a 180ºC durante 45-50 minutos.
Dejamos enfriar.

CREMA DE CHOCOLATE BLANCO

200 grs chocolate blanco
1/2 litro de leche
2 cucharadas de azúcar
2 yemas de huevo
1 ccda de maicena

Ponemos a derretir el chocolate al baño María y en otro cazo la leche a hervir.
En un tazón mezclamos las yemas con el azúcar y la maicena. Cuando la leche esté caliente añadimos unas cucharadas para deshacer bien la mezcla. Una vez deshecho, vertemos la mezcla del huevo en el cazo de la leche y removemos, y por último el chocolate derretido. Damos vueltas unos minutos hasta que quede un poco espeso. Si necesitamos espesar más se le puede echar otro poco de maicena disuelta en leche.
Retiramos del fuego y dejamos enfriar.

MONTAJE

Antes de comenzar con el montaje, tenemos que hacer un almíbar: ponemos en un cazo un vaso de agua con 2 cucharadas de azúcar. Llevamos a ebullición, apagamos el fuego y añadimos un chorrito de algún licor o vino dulce. Una vez frío el almíbar, podemos comenzar a montar el trifle.

Cortamos un par de rodajas de bizcocho, no demasiado gordas. Cubrimos el fondo del trifle con una capa y mojamos con el almíbar (nos podemos ayudar con un pincel o una cuchara), que quede bien empapado. A continuación extendemos una capa de mermelada de frutos rojos y echamos por encima trocitos de fresas previamente lavados. Por último, la mitad de la crema de chocolate.

Y volvemos a seguir los mismos pasos: bizcocho, almíbar, mermelada, fresas y crema.

En realidad podríamos seguir así hasta cubrir entero el molde. A mí me ha dado para dos capas.

Lo importante es el colofón final: después de la crema de chocolate colocamos una capa de nata montada (mejor sin azúcar, para compensar) y para decorar podemos poner virutas de chocolate blanco, o más trozos de fresas, o montoncitos de mermelada…

Bueno, pues feliz día de San Esteban.

¡Déjanos un comentario!